Los acordes de la canción “No sé tú” y “La incondicional”, y una batería de sus grandes hits fueron los que dieron la partida al show más esperado de este Festival de Viña del Mar 2012.
Luis Miguel, el astro que cobró un millón de dólares por su actuación, salió a la 01.10 de la madrugada a cantar sobre el escenario de la Quinta Vergara.
Vestido de riguroso negro, que resaltaba su tradicional tez bronceada, comenzó su show con el tema “Te propongo” y luego con parte de sus grandes éxitos como “Suave”, y “Con tus besos”.
Tras las primeras canciones se dirigió al público diciendo: “Gracias por celebrar conmigo. ¿Cómo está mi gente de arriba hasta la última fila?.. Hace 18 años que estuve en el Festival. Es una gran celebración. Hay un pedazo de Viña del Mar en mi corazón”.
Tras ello comenzó a cantar varios de los boleros que lo han hecho un ídolo en toda Latinoamerica, “Somos novios”, “Por debajo de la mesa”, “La gloria eres tú”, “Inolvidable”, “La última noche” y su versión de “Fly away with me”, mientras en la pantalla aparecía la imagen de Frank Sinatra, uno de los ídolos mexicanos.
El show se completó en los exactos 80 minutos en los cuales incluyó medleys de sus épocas más juveniles con canciones como “Que nivel de mujer” y”Fiebre de amor”.
A pesar de los problemas de sonido, el artista se vio feliz en su regreso al país, dándose tiempo para saludar al público, recibir rosas, peluches de parte de sus cientos de admiradoras.
El espectáculo cerró con una lluvia de papeles picados al son de la canción “Cuando calienta el sol”. A las 02.40 de la madrugada le fue entregada una Gaviota de Plata, y a los pocos segundos la Gaviota de Oro, mientras el público enfervorizado pedía más premios.
Así tal como se había filtrado se le entregó un galardón especial, una Gaviota de Platino, y las llaves de la Ciudad Jardín, de manos de la alcaldesa Virginia Reginato.
